Punta Arenas. 3 enero 2025. La Cámara Chilena de la Construcción Magallanes organizó el Seminario “Riesgo Sísmico en la Región de Magallanes”, donde se presentó una innovadora propuesta de zonificación sísmica para Punta Arenas. El evento contó con las exposiciones de los ingenieros civiles Ramón Carrasco y Pablo Villarroel, expertos de Geotecnia Patagonia y miembros de la Sociedad Chilena de Geotecnia (SOCHIGE).
“Chile cuenta con rigurosas normativas sísmicas que establecen estándares de protección para la ciudadanía, garantizando la seguridad de las edificaciones. Como sector de la construcción, nos enfocamos en profundizar en los aspectos constructivos y en las técnicas de mejoramiento de suelo, para que toda edificación cumpla con la normativa sísmica, lo que resulta fundamental para una infraestructura resiliente y para la seguridad de la comunidad”, aseveró Cristian Prieto, Consejero Nacional de la Cámara Chilena de la Construcción.
A pesar de que la mayoría de la ciudadanía cree que la región más austral de Chile es asísmica, la realidad es que Magallanes se encuentra en la confluencia de tres placas tectónicas: Sudamericana, Antártica y Scotia. El sistema de Fallas Magallanes-Fagnano, que se presenta en la unión de las placas Sudamericana y Scotia, es la zona de origen de dos grandes eventos sísmicos de la región: uno en 1879, con una magnitud entre 7.0 y 7.5 en la escala Richter, y otro en 1949, que alcanzó una intensidad de 7.5 a 7.8 Richter, dejando tres fallecidos, 18 heridos y 225 damnificados.
“Hace pocos días (17 de diciembre) se cumplieron 75 años del último gran sismo en Punta Arenas, lo que podría indicar que estamos próximos a experimentar un nuevo evento telúrico, considerando que, según estadísticas, estos ocurren en la zona aproximadamente cada 70 años. Este intervalo de tiempo se debe al lento movimiento de las placas tectónicas de contacto, mucho más pausado que en otras regiones del país. Sin embargo, aunque es imposible predecir con exactitud cuándo ocurrirá un sismo, es fundamental estar preparados”, explicó Ramón Carrasco, gerente de Geotecnia Patagonia y socio de la CChC Magallanes desde 2008.
En el Seminario abierto a la comunidad, se mostró que Punta Arenas, ciudad que ha triplicado su superficie desde 1949, presenta una alta heterogeneidad de suelos, con predominio de formaciones arenosas. El estudio, reveló que el sector costero y la zona norte de la ciudad podrían presentar los mayores efectos adversos ante eventos sísmicos, principalmente debido a la presencia de suelos potencialmente licuables y orgánicos.
“Antes de construir es imprescindible realizar un adecuado estudio de suelo, porque en Punta Arenas hay una gran diversidad de tipos de suelo. Si se identifica un suelo especial, con características más complejas, existen hoy en día una serie de soluciones geotécnicas que permitirían construir allí edificaciones que respeten las normativas sísmicas chilenas NCh433 y NCh2369”, aseguró Carrasco.
Los expertos en geotecnia presentaron mapas de interpolación que identifican las zonas más presentarían mayores niveles de demanda sísmica, como lo son las unidades de suelos orgánicos en el sector norte, las unidades arenosas del borde costero y el sector del cerro La Cruz. En contraste, las zonas hacia el sur y poniente de la ciudad mostrarían menor susceptibilidad.