Conmemoración del 11 de septiembre en Punta Arenas reunió a sobrevivientes, autoridades y jóvenes
Punta Arenas. 12 septiembre 2025. A 52 años del golpe de Estado de 1973, ayer se llevó a cabo en el Estadio Fiscal de Punta Arenas una ceremonia de conmemoración, organizada por la Delegación Presidencial Regional de Magallanes y Antártica Chilena. La actividad reunió a autoridades regionales, agrupaciones de derechos humanos, sobrevivientes, representantes de establecimientos educacionales, estudiantes, representantes de la sociedad civil y vecinos y vecinas de la ciudad.
El recinto deportivo —utilizado como centro de detención y tortura durante los primeros días de la dictadura— se transformó en un espacio de memoria activa, encuentro intergeneracional y profundo compromiso con los derechos humanos. La jornada incluyó intervenciones artísticas, testimonios de sobrevivientes, presentaciones musicales y emotivos momentos de reflexión y reconocimiento.
En sus palabras del Delegado Presidencial Regional, José Ruiz, señaló que “como cada año, conmemoramos este 11 de septiembre como un día que llama profundamente a la reflexión de que hace 52 años se quiebra dramáticamente la democracia en nuestro país y comienza desde el primer minuto una persecución contra miles de compatriotas. Aún hay más de mil que seguimos buscando”. Subrayó además la relevancia del Plan Nacional de Búsqueda impulsado por el Presidente Gabriel Boric, afirmando que “lo que estamos realizando el día de hoy tiene un sentido de entrega de testimonio de sobrevivientes… a las nuevas generaciones, como una aposta de que los derechos humanos deben respetarse siempre”.
Uno de los momentos más significativos de la jornada fue el testimonio del profesor Baldovino Gómez, ex preso político detenido en Tierra del Fuego, quien recordó que “es más necesario que nunca que nos encontremos, que nos reunamos. Estamos en una situación difícil como país, porque la derecha y la ultraderecha pretenden negar lo que pasó, o relativizar la grave violación a los derechos humanos. Sin embargo, en Magallanes, el terrorismo de Estado nunca se ocultó. Se ejercía a plena vista”. Agradeció la realización del acto y recalcó que “hoy es un momento de reflexión, pero también de compromiso con el ‘nunca más’”.
El acto tuvo también un componente profundamente simbólico con la participación de Sofía Barrientos, estudiante de enseñanza media del Liceo Sara Braun, quien representó a las nuevas generaciones y habló con convicción sobre la importancia de la memoria histórica. Tras su intervención, ella junto a Felipe Miranda, Francisca Rivera, Javiera Soto y Daira Nieto recibieron de manos de sobrevivientes de la dictadura un testimonio simbólico de memoria y resistencia, marcando el traspaso generacional de una historia que no puede olvidarse.
En ese mismo espíritu, el Seremi de Deportes, Alejandro Olate, compartió su vivencia como joven de 17 años al momento del golpe. “Vi cómo un país que estaba floreciendo se destruía… especialmente la democracia, las familias, las separaciones, las prisiones, los exilios. El mensaje que entrego es que la memoria debe mantener las situaciones más intensas que se han vivido en este país, para recuperar la conciencia de que a través del diálogo y el entendimiento se pueden formar grandes proyectos, especialmente para los más necesitados”. Añadió que “debemos ser claros, consecuentes, y cuidar nuestra democracia. Todavía hay más de mil detenidos desaparecidos y familias que no han cerrado el ciclo”.
Otro momento significativo fue la intervención de Francisco Alarcón, presidente de la Agrupación de Ex Presos Políticos y Familiares, quien recalcó la importancia de realizar estas conmemoraciones en sitios con alto valor histórico. “Aquí se torturó, se violentaron los derechos fundamentales por pensar diferente, por abrazar causas transformadoras. Esta historia tiene que conocerse para que no vuelva a repetirse”. Valoró además la presencia de estudiantes, indicando que “para nosotros es vital que los jóvenes conozcan esta historia. Es parte de su formación y una manera de decir que esto no puede volver a ocurrir”.
Desde el mundo de la cultura, Francisco Abarzúa, ex preso político, realizó una emotiva declamación poética en homenaje a quienes ya no están, incluyendo al presidente Salvador Allende. En su intervención, resonó la histórica frase: “más temprano que tarde se abrirán las grandes alamedas”, invocando el anhelo de un Chile más justo, democrático y solidario.
La Seremi de Salud, Lidia Amarales, también compartió su testimonio personal: “Para nosotros, los que fuimos víctimas, este día es muy importante. No podemos olvidar. Cuando hay negacionismo desde quienes fueron protagonistas del golpe, se impide crecer como país. Aquí fuimos víctimas inevitables, como dijeron algunos. ¿Habrá otro momento inevitable para romper la democracia? Eso no puede pasar nunca más. Solo con reconocimiento y perdón —que aún no recibimos— podemos avanzar”.
Durante la ceremonia, se guardó un sentido minuto de silencio en memoria de don Custodio Aguilar, ex preso político recientemente fallecido, quien fue parte activa del movimiento de derechos humanos en la región.
La actividad también incluyó la presentación del cantautor Sergio Reyes, quien interpretó canciones de contenido social y político, y culminó con una acción colectiva: las y los asistentes depositaron un clavel rojo en los antiguos camarines del estadio, como gesto de homenaje a las víctimas y de compromiso con la justicia y la memoria.
Desde el Gobierno, el Presidente Gabriel Boric Font ha reiterado en diversas ocasiones la importancia de una memoria activa, señalando que: “las violaciones a los derechos humanos son indivisibles del golpe de Estado” (Fuente: Cooperativa.cl). El Estado mantiene su compromiso con políticas públicas de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición, entendiendo que la democracia se fortalece con memoria y participación ciudadana.
La conmemoración de este 11 de septiembre en Punta Arenas fue una jornada de reflexión profunda, encuentro entre generaciones y reafirmación del compromiso con el “nunca más”. Porque recordar no es anclarse en el pasado, sino construir futuro desde la verdad.
