Punta Arenas. 8 febrero 2019. Febrero es el mes que en las últimas tres temporadas ha concentrado el mayor número de visitantes en el sendero Base Torres, en el Parque Nacional Torres del Paine.
Ello demuestra la alta demanda que genera este atractivo, uno de los lugares más reconocidos por los turistas dentro de una de las áreas protegidas más afamadas de Chile en el extranjero. El mirador Base Torres tiene una extensión de 9,4 kilómetros y se convierte en todo un desafío para los viajeros que lo recorren.
En la temporada turística 2015-2016, el máximo diario de personas que subió al mirador Base Torres fue de 1.178 personas, con un promedio diario en la temporada alta (entre noviembre y marzo) de 480 personas; en la temporada 2016-2017, el día con mayor cantidad de visitantes alcanzó 957 y tuvo un promedio de 540 personas diarias; y en la temporada 2017-2018, su máximo diario fue de 1.088, con un promedio diario en la última temporada de 542.
Estos y otros datos fueron obtenidos por el Centro Regional Fundación CEQUA, que desde 2015 realiza un monitoreo del flujo de visitantes obteniendo información de la dinámica de quienes suben al Mirador Base Torres, los datos que proporcionan los equipos pueden ser analizados por hora, día, semana, mes, temporada y año. En el parque administrado por la Corporación Nacional Forestal, se tiene un equipo que cuenta con registros y análisis desde diciembre de 2015 hasta diciembre de 2018.
Según explica la investigadora CEQUA, Juliana Torres Mendoza, esta información se obtiene a partir del monitoreo de contadores de flujo bidireccionales instalados en el Parque Nacional Torres del Paine. Esto ha permitido obtener información clara y fidedigna que permite entender y analizar la dinámica de los visitantes en esta área protegida y en lugares prioritarios a lo largo del tiempo, lo cual puede aportar a tomadores de decisiones para implementar acciones basadas en datos y mejorar la calidad de la experiencia de los visitantes.
Los datos permiten incluso observar la distribución horaria a lo largo de un día. El comportamiento de los visitantes a lo largo del día es constante en temporada alta, entre los meses de noviembre a marzo, en donde se pueden reconocer dos grupos principalmente. El primero de los visitantes espera llegar al mirador Base Torres al amanecer, inicia su trekking a partir de las 2 a 3 de la madrugada y para retornar antes de las 6 de la mañana.
El segundo es el más numeroso y realiza su recorrido entre las 9 y las 13 horas. Los visitantes que suben a Base Torres en ese horario son los que experimentan una mayor concentración de senderistas, ya que pueden estar al mismo momento ascendiendo junto a otras 150 personas o más, lo que podría influir negativamente en la experiencia, ya que claramente se generara una sensación de aglomeración en pocas horas del día, cuando estamos ofreciendo atractivos turísticos en una latitud que nos permite tener horas de luz difíciles de igualar.
Los contadores tienen gran relevancia, ya que permiten una caracterización en el flujo de los visitantes y son una herramienta que podría aprovecharse para generar una mejor calidad de la experiencia de los visitantes, y dar luces de las necesidades reales actuales y posibles proyecciones que permitan incluso pensar en las necesidades de un sistema sanitario acorde a quienes por allí transitan.
Y, por lo mismo, estos datos sirven tanto para los organismos públicos como para los representantes del sector privado ligados al turismo, que requieren de información robusta para facilitar su toma de decisiones.
En estos días se realizará una visita al sector para verificar nuevos antecedentes y el estado de los contadores de flujo para conocer los datos correspondientes a esta temporada.