Punta Arenas. 25 mayo 2010. La visión mundial del sector empresarial para tratar los RILES y las substancias líquidas contaminantes generadas durante sus procesos productivos, especialmente en el ámbito de los hidrocarburos, fue lo que impulsó a ENAP a insertarse en el tema y tratar las fosas existentes en toda la región de Magallanes.
Es así que la empresa petrolera regional explicó a la Comisión de Medio Ambiente del Core los procesos que utilizan actualmente en el manejo de Riles, que son aguas de desecho generadas en establecimientos industriales como resultado de un proceso, actividad o servicio.
Las descargas de residuos industriales líquidos se caracterizan por contener elevadas concentraciones de elementos contaminantes. La descarga de RILES puede provocar corrosión, gases tóxicos o inflamables, serias interferencias en el proceso biológico de las plantas de tratamiento de aguas servidas, graves efectos en el medio ambiente y en la flora y fauna acuática de los ríos, lagos y cauces naturales, trastornos en la agricultura, entre otros.
“Resulta innegable que estamos dando los pasos correctos hacia la consolidación de un cuerpo legal que regule la disposición final de los RILES, pero también sabemos que ninguna ley es la panacea; por ello valoramos los esfuerzos hechos por ENAP al mostrar preocupación por este tema”, afirmó José Ruiz, Presidente de Comisión.
Claudio Leal, representante de ENAP Magallanes, quien expuso el novedoso sistema de manejo de estos residuos al Core, explicó en detalle el trabajo que han venido desarrollando desde el año 2005 cuando ENAP, por decisión propia, asume el desafío de implementar un estudio del territorio regional para medir riesgos de contaminación.
“Se determino cuáles eran las fosas criticas, número que bordeó las mil. Con ese dato, debíamos saber primero si cumplíamos con la norma de referencia o no. Para eso, nos asociamos con Fundación Chile quien nos asesoró en materia ambiental y a partir de ahí comenzamos el proceso de limpieza de fosas. De las mil fosas, que inicialmente estaba fuera de la norma permitida, intervenimos el 42 %, las que hoy día son consideradas como suelos limpios” afirmó el Ejecutivo.
Leal recalcó la intención de ENAP de sanear el 100% de las fosas que están contaminadas con hidrocarburos en toda la región de Magallanes, “y para ello nos hemos asociado a CONAMA, la UMAG y Fundación Chile, con quienes obtuvimos el financiamiento de un proyecto de Innova Chile, que nos permitirá hacer una prueba piloto en el área de saneamiento de hidrocarburos. Para esta iniciativa contamos con 400 millones de pesos, que transformaremos más tarde en capital de conocimiento”.
Junto a lo anterior, el ejecutivo comentó además detalles del proyecto que espera potenciar la petrolera, para implementar un centro de sustentabilidad ambiental en Magallanes, dada la falta de conocimiento que existe sobre este tema en el país. “Esto traería asociada la posibilidad de conformar en nuestra región una normativa de suelo que aporte a la elaboración de una normativa a nivel nacional”, dijo.
Hasta el momento, ENAP ha invertido cerca de 24 millones de dólares en la limpieza de fosas, lo que fue valorado por la Consejera Regional Nancy Dittmar. “Este era un tema pendiente que debía ser abordado por la empresa estatal. Así como exigimos estándares a los privados, también nos parecía aun más importante que ENAP cumpliera con la normativa vigente, dada la responsabilidad que le cabe al ser una empresa del Estado”.
Para el Presidente de Comisión, Consejero José Ruiz, lo interesante del procedimiento utilizado por ENAP es la utilización de la “Tecnología de Plasma”, sistema que podría ser aplicable a la conversión de otros residuos como los industriales o de lenta degradación.
Sobre el particular, Leal aclaró que esta tecnología de punta, que permite convertir los residuos en energía, se puede usar para procesar todo tipo de materiales sólidos, líquidos y gaseosos, produciendo materiales inertes o de gran valor comercial como el gas, que obtenido por plasma, se convierte en un gas de síntesis que, en forma eficiente, reemplazaría a los combustibles fósiles, presentando interesantes alternativas para generar electricidad.
“Este proceso es seguro y fácil de operar. Sólo falta que se pierda el miedo a utilizarlo. En Canadá la utilizan desde hace años generando importante cantidad de mega watts. Son tecnologías limpias que cumplen con las normas internacionales más exigentes que existen”, afirmó Leal.
Por lo anterior, la Comisión acordó concretar una exposición sobre los pormenores de esta tecnología, que permitirá socializar su funcionamiento, al interior del Consejo Regional.