Santiago. 25 febrero 2016. El ajuste fiscal en el que trabaja por estos días el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, tiene en alerta a los parlamentarios oficialistas. Esto por el efecto que podría tener un eventual recorte de gasto en los recursos disponibles de cara a las próximas elecciones municipales de octubre de este año.
El interés de los parlamentarios es tal que algunos como el diputado DC Pablo Lorenzini anticipan su intención de que el ministro Valdés se reúna con la comisión mixta de Presupuestos para analizar la situación de las finanzas públicas y explicar los alcances de una eventual reducción de los recursos públicos para este año.
En todo caso se trata de una preocupación compartida por la oposición, ya que tanto desde RN como la UDI, el senador José García Ruminot y el diputado Ernesto Silva coinciden en la pertinencia de que la comisión se reúna con el jefe de las finanzas públicas en las próximas semanas.
Ayer el senador del MAS, Alejandro Navarro, dijo que en el próximo comité político planteará al secretario de Estado considerar el impacto político que tendría un ajuste.
“Los ajustes fiscales van a tener costos políticos y electorales y alguien tiene que responsabilizarse de aquello. Echarle la culpa a la baja en la economía o al bajo precio del cobre puede ser un argumento estadístico financiero, pero Valdés debe tener un lenguaje y un razonamiento político -social”, enfatiza Navarro.
Similar opinión tiene el diputado Lorenzini, quien subraya que “el país no debe restringirse, sino todo lo contrario. El Estado tiene que aportar en inversiones, pero con eficacia y eficiencia”. Añade en que no está de acuerdo en disminuir los recursos en un año de elecciones, ya que las personas esperan que existan recursos para “su escuelita, su estadio, su sede social, más que para grandes estructuras”.
Una visión distinta tiene eso sí el diputado del PPD, Enrique Jaramillo, quien respalda la decisión de Valdés y asegura que “la ciudadanía no se dará cuenta de los pequeños ajustes del gobierno”.
En esta línea, el senador PPD Ricardo Lagos Weber concide en la necesidad de revisar las necesidades de gasto, ya que “no podemos ser ciegos a lo que ocurre en la economía internacional y con el precio del cobre”. Pese a ello, sostiene que “en los temas de inversión pública, y estoy pensando básicamente en hospitales, no hay mucho espacio para recortar gastos. Deberían ser reducciones de honorarios, viáticos, gastos corrientes, para no perjudicar la inversión pública”.
El Presupuesto de este año contempla una expansión del gasto público de 4,4%, tres puntos porcentuales por debajo del desembolso de 2015, en un contexto de sostenido deterioro en las expectativas de crecimiento, que algunos incluso ubican cada vez más cerca del 1%.
Ajuste necesario
En la oposición, los legisladores destacan que el recorte de gastos se podría haber evitado, ya que el menor crecimiento económico se explica principalmente por la incertidumbre que generaron las reformas estructurales del gobierno.
“No se saca nada con apretar el presupuesto, sino se dan señales de confianza al inversionista y eso tiene que ver con no tratar de hacer un país de nuevo. Aquí el problema es político no económico”, subraya el senador UDI, Juan Antonio Coloma.
Palabras que comparte el diputado del mismo partido Ernesto Silva, quien apunta a que “la Nueva Mayoría está cosechando lo que sembró”. En esa línea, añade que es de la idea que“el gasto no puede seguir creciendo de la manera que lo ha hecho y tiene que tener un ajuste significativo”.
El senador de RN, José García Ruminot, valora la intención de Valdés de realizar un ajuste. “Los gobiernos internacionales están mirando a Chile y no se puede arriesgar a que se reduzca su calififcación de riesgo, ya que eso permite al propio Estado endeudarse con bajas tasas de interés”.
¿Endeudamiento?
García Ruminot añade que si el gobierno reconoce oficialmente menores ingresos existe la posibilidad de recurrir al Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES) o, por otra parte, podría ingresar un proyecto de ley que permita aumentar el endeudamiento del país.
El senador Navarro también cree que un mayor endeudamiento podría ser necesario para cumplir con los programas sociales comprometidos por el gobierno. “El no cumplimiento del programa tendrá consecuencias políticas y electorales”, enfatiza Navarro.
Fuente: La Tercera.